El escenario político argentino se mantiene tenso en torno a la Defensoría del Niño. El Kirchnerismo y la Unión Cívica Radical (UCR) han sellado un pacto que asegura la continuidad de Marisa Graham en el cargo con su mandato autoprorrogado.

Esta decisión ha generado controversia en otros sectores políticos y sociales del país, quienes insisten en la necesidad de una renovación en la Defensoría. Sin embargo, el acuerdo entre el Kirchnerismo y la UCR parece blindar a Graham de cualquier intento de remoción.

Algunos voceros de la oposición han expresado su descontento con lo que consideran un 'pacto de silencio', en el cual se ignora el clamor de sectores que piden cambios en la Defensoría. Sin embargo, las fuerzas políticas en el poder parecen decididas a mantener el status quo.

El futuro de la Defensoría del Niño sigue siendo incierto, pues aunque Graham cuenta con el respaldo del Kirchnerismo y la UCR, las tensiones políticas y sociales podrían desencadenar cambios imprevistos. Mientras tanto, el pueblo argentino espera con ansiedad los próximos movimientos en este complejo tablero político.

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