San Isidro ya no es lo que era. Esa frase se repite en redes, en los grupos de WhatsApp y en las charlas del día a día. Lo que antes parecía aislado, hoy es cotidiano: robos a plena luz del día, motochorros que aparecen de la nada, casas vacías que vuelven con ventanas forzadas y la sensación de que nadie controla nada.

José Ramírez, de 24 años, vecino de Beccar, nos contó:
“Te puede pasar volviendo del boliche, saliendo de laburar o yendo al gym. Estamos todos atentos, mirando para todos lados... y aún así no alcanza.”

El jueves 24 de abril a las 19 horas, vecinos de distintos barrios convocan a una manifestación pacífica frente a la Municipalidad, en Centenario 77. La convocatoria nació en redes y se expandió rápido. Hay algo que está claro: la bronca está creciendo.

Entre los hechos que más circularon en los últimos meses se cuentan enfrentamientos entre bandas armadas con víctimas civiles, robos violentos a peatones y agresiones físicas a vecinos, incluso adultos mayores. Algunos locales comerciales también fueron asaltados en plena apertura.

Un proyecto que buscaba citar al intendente Ramón Lanús al Concejo Deliberante para explicar qué plan de seguridad se está implementando fue bloqueado por la mayoría automática: concejales de Convocación por San Isidro, del oficialismo local, y del peronismo alineado a Cristina y a Kicillof.

En redes, muchos se preguntan: si no tienen nada que ocultar, ¿por qué no quieren hablar?